21 de octubre de 2022.- Investigadores y autoridades se dieron cita este viernes 14 de octubre para identificar las relaciones entre conectividad vial y enfermedades infecciosas, con miras de dar aportes para incorporar un enfoque de salud pública en el planeamiento y diseño de la infraestructura de transportes, identificados en el estudio «Hacia un enfoque de salud pública en el desarrollo de proyectos viales en la Amazonía», resultado de una alianza entre la Clínica de Gestión Ambiental de la Universidad del Pacífico y Derecho, Ambiente y Recursos Naturales.
Al respecto, Ciro Salazar, especialista de DAR, resaltó que ya existe evidencia científica en el país que vincula la incidencia de casos como el dengue, malaria o leishmaniasis con los impactos indirectos asociados a la construcción de distintos proyectos viales en la Amazonía.
“Es particularmente conocido el caso de la Interoceánica Sur, que favoreció el crecimiento desordenado de centros poblados, lo cual, de la mano con el limitado acceso a servicios públicos, contribuyó a la dispersión del dengue en Madre de Dios y Puno, de acuerdo a estudios del Ministerio de Salud”, destacó Salazar.
Desde una mirada latinoamericana, Rodrigo Botero, director de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible (FCDS) de Colombia destacó que actualmente los temas de salud y medio ambiente están cada vez más entrelazados: “en ese sentido van a haber nuevos impactos a nivel de salud pública que deberán ser incorporados. En los últimos años hemos visto la correlación directa entre los procesos de calidad de aire en las ciudades con la movilización de las partículas en suspensión derivadas de las grandes quemas de los bosques del continente”.
“En ese sentido habrá que establecer mecanismos regionales o macrorregionales que permitan monitorear efectos de salud pública de áreas que fácilmente traspasan las fronteras”.
Cabe destacar, que entre los desafíos que presenta el futuro de la conectividad vial en el Perú, se encuentra tomar medidas adecuadas para incorporar criterios sociales y ambientales desde la planificación y formulación de proyectos. Esta urgencia recae, por ejemplo, en que la ampliación de infraestructura vial es la segunda causa de deforestación en el Perú entre el 2001 y 2019, de acuerdo a estudios recientes.
Esta proyección es particularmente importante para la Amazonía peruana. Al respecto, Ciro Salazar, destaca: “De ejecutarse todas las vías proyectadas en la Amazonía, su stock de vías asfaltadas se quintuplicaría en la presente década, según un análisis realizado con datos del Ministerio de Transportes y Comunicaciones para las regiones de Loreto, Madre de Dios y Ucayali”.
Sobre ello, Mónica Nuñez, una de las coordinadoras del informe presentado y Doctoral Student de la Universidad de Minnesota, señaló: “Justamente nuestra propuesta es que estas consideraciones de impactos en salud pública y en la salud ambiental debería darse en la etapa de formulación y evaluación de un proyecto de inversión, porque justo es en ésta donde se discute la justificación de un proyecto, su viabilidad, sus principales impactos y también su sostenibilidad”.
Luis Barrios, coordinador de la Dirección de Evaluación Ambiental del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, señaló: “Coincidimos con que en las primeras etapas la incorporación de estos componentes [ambientales] son vitales (…), principalmente en la etapa de formulación y evaluación, a través de una evaluación preliminar. (…) ahí identifican, por ejemplo si el proyecto se superpone a áreas naturales protegidas o ecosistemas frágiles, etc.”.
Asimismo, mencionó como oportunidad de mejoras en el sector transporte el incorporar en el planeamiento de la infraestructura vial nacional, regional y vecinal los criterios relacionados a la deforestación y salud pública, y asociarlos con las políticas del sector transporte; y vincular al titular de la vía y autoridades locales en el control de los impactos indirectos que se generan a partir de esas vías.
Por su parte, William Llactayo, de la Dirección General de Ordenamiento Territorial y de la Gestión Integrada de Recursos Naturales del Territorio del Ministerio del Ambiente, sumó el reto de incrementar las inversiones y el gasto corriente en infraestructura natural
“Es un proceso al que estamos abocados en el MINAM en el que buscamos que las acciones se centren en la conservación y apoyo al uso sostenible en aquellas áreas donde todavía se mantiene la funcionalidad de los ecosistemas boscosos o no boscosos. (..) Y en aquellas zonas donde ya han pasado el estado de degradación, estamos intentando impulsar las acciones de recuperación”, señaló Llactayo.
Asimismo, comentó los avances de un estudio liderado por la Universidad Cayetano Heredia y la NASA, con participación del MINAM, que busca encontrar la relación entre el cambio de cobertura terrestre en la Amazonía y los brotes de enfermedades infecciosas, para informar la toma de decisiones para la prevención de zoonosis.