Foto: Maria Fe Mendoza/DAR
Las organizaciones indígenas, como la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP), la Confederación Campesina del Perú (CCP), la Confederación Nacional Agraria (CNA), la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú (CONAP), Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú (FENMUCARINAP), Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (ONAMIAP) y la Unión Nacional de Comunidades Aymaras (UNCA), continuaron participando, los días 25 y 26 de abril, en la construcción de los compromisos nacionales para la implementación del Marco Mundial de Diversidad Biológica, a través de de la Estrategia Nacional de Diversidad Biológica (ENDB).
Las siete organizaciones miembro de la Plataforma de los Pueblos Indígenas para enfrentar el Cambio Climático [1] instaron al Ministerio del Ambiente para que incorpore sus aportes al problema público presentado por el gobierno, el cual incluye la visión indígena en un territorio nacional donde viven 55 pueblos indígenas [2]: «Incremento del deterioro, disminución, destrucción y extinción de la biodiversidad, territorio, Pachamama, Madre Naturaleza y diversidad cultural». Además, manifestaron que las causas deben reconocer claramente que las actividades ilícitas y extractivas, la infraestructura mal planificada, así como las normativas y políticas lesivas, destruyen la diversidad biológica e incrementan los impactos del cambio climático en el territorio ancestral.
De la misma manera, la representación indígena planteó objetivos prioritarios para resolver las causas a partir estrategias transversales con los tres niveles de gobierno, como por ejemplo la reducción de la contaminación ambiental, fomentar el uso de técnicas y tecnologías de producción que incluyan el conocimiento tradicional indígena, asegurar la sostenibilidad de las formas de conservación indígena, fortalecer la gobernanza para mantener la biodiversidad, implementar mecanismos de transparencia, asegurar la distribución justa de los beneficios, acceso oportuno al financiamiento, participación efectiva en las decisiones de inversiones en el territorio, así como el respeto a la consulta previa, libre e informada, entre otros.
Desde Derecho Ambiente y Recursos Naturales, instamos al MINAM que garantice la participación efectiva de las organizaciones indígenas y otros actores, lo cual incluye la incorporación de otras miradas y saberes para la conservación de la diversidad biológica desde el territorio, que serán indispensables para el logro de las metas al 2030 para hacer frente a la crisis de la pérdida de diversidad biológica.
[1] Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP), la Confederación Campesina del Perú (CCP), la Confederación Nacional Agraria (CNA), la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú (CONAP), Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú (FENMUCARINAP), Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (ONAMIAP) y la Unión Nacional de Comunidades Aymaras (UNCA)