Lima, 29 de abril de 2022.- A 100 días del derrame en la refinería La Pampilla, la Defensoría del Pueblo hizo público su informe sobre el caso, determinando que existió una respuesta tardía en el dictado de medidas administrativas por parte de OEFA; en la activación del Plan Distrital de Contingencia, por parte de DICAPI; y en la inclusión de SERFOR en la declaración de emergencia ambiental, entre otras. Estos hallazgos fueron resaltados durante su exposición en el conversatorio “Acciones estatales frente al desastre petrolero en Ventanilla: Balance tras 100 días de su ocurrencia”, impulsado por dicha institución.
Asimismo, subrayó las demoras dadas en dictar medidas administrativas para actualizar o modificar el plan de contingencias de dicha empresa desde que fue aprobado en el año 2015. En este aspecto se identificaron conflictos de competencia entre OEFA, DICAPI y APN sobre la institución a la cual le corresponde fiscalizar este plan. Esto es importante ya que la claridad en las medidas es clave para la aplicación de un plan de contingencia adecuado, que realmente permita prevenir que un derrame se convierta en un desastre ambiental.
Responsabilidad limitada
Asimismo, la Defensoría mencionó durante el evento que en el Plan de acción inmediato y de corto plazo, aprobado en el marco de la Declaración de Emergencia Ambiental, solo se contempla beneficios limitados para un grupo reducido de pescadores, y no se advierten responsabilidad directas para la atención de la población afectada en sus medios de vida.
Hacer público los resultados de dicho Plan, así como el nivel de cumplimiento del Plan de Acción de primera respuesta elaborado por la empresa ha sido una recomendación de la sociedad civil desde el inicio para tener información objetiva, clara y oportuna sobre el avance de los procesos de limpieza, remediación y atención de la población afectada. En ese marco, la Defensoría recomendó al Ministerio del Ambiente difundir los reportes diarios de las acciones de todas las instituciones públicas involucradas.
Un mejor registro de atención a los afectados
Por otro lado, la Defensoría mencionó su preocupación por la falta de claridad y registro de las atenciones a la población afectada, pues se debe establecer un procedimiento de abordaje integral a la población expuesta, así como reportes mensuales sobre las acciones realizadas. Recordemos que al menos dos personas fueron hospitalizadas por intoxicación aguda tras el contacto directo con el hidrocarburo, y recientemente pobladores han denunciado sufrir síntomas que estarían asociados a la exposición de hidrocarburos. Desde DAR se reitera la necesidad de que se hagan públicos estos reportes.
Sobre este tema, Verónica Portugal, especialista de DAR, comenta “es necesario aplicar la transparencia, no solo para permitir la vigilancia ciudadana y asegurar que la población pueda estar al tanto de los procesos que se vienen desarrollando actualmente, sino para visibilizar las problemáticas que existen en los procesos de emergencias ambientales, tal como ha identificado la Defensoría, y contribuir con su mejora”.
Lee recomendaciones plasmadas en el informe de la Adjuntía del Medio Ambiente, Servicios Públicos y Pueblos Indígenas de la Defensoría “Derrame de petróleo en la refinería La Pampilla: recomendaciones frente a un desastre ambiental que pudo evitarse”.
Principales recomendaciones
Para la Defensoría es urgente intensificar las investigaciones que realizan las instituciones públicas para determinar los daños del derrame en la refinería La Pampilla, y su valoración, para que la Procuraduría Pública Especializada en materia ambiental pueda continuar con sus funciones de defensa del Estado.
Además, este organismo recomienda al Ministerio de Justicia a prestar servicio de defensa pública a los afectados por este derrame, debido a la asimetría de poder e información que rige en las negociaciones entre los afectados y la empresa.
Asimismo, recomienda a OEFA, verificar la veracidad de la información que viene difundiendo la Refinería La Pampilla S.A.A. para que la ciudadanía se informe con objetividad.
Desde DAR, coincidimos con estas recomendaciones e instamos a todas las instituciones a implementar los cambios necesarios en los marcos regulatorios para prevenir y enfrentar con eficiencia este tipo de desastres, así como difundir información oportuna a la población sobre sus acciones y sus resultados, y proveer información sobre los impactos y daños, de tal manera que el desastre ecológico ocasionado no quede impune.