- Perú es una de las economías del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) más vulnerables al cambio climático, debido a la elevada susceptibilidad de nuestros ecosistemas, y nuestra limitada capacidad de adaptación a este fenómeno.
- El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) proyectaron que las pérdidas económicas originadas por los impactos del cambio climático en nuestro país hacia el 2040 podrían equivaler hasta el 4% del Producto Bruto Interno (PBI).
El Perú cuenta con más de 72 millones de hectáreas de bosques naturales, de los cuales 68 millones se encuentran en nuestra Amazonía. Ellos representan una importante reserva de carbono para el mundo, contribuyendo a la mitigación del cambio climático, y constituyéndose en una nueva oportunidad de inversión mediante los mercados de carbono.
Dado que una de las prioridades del APEC es dar facilidades para la inversión, buscando reducir el tiempo, costos e incertidumbre para hacer negocios, el contexto de cambio climático nos obliga a pensar en herramientas e instrumentos de gestión para promover un crecimiento económico basado en la planificación estratégica y la gobernanza para el uso sostenible de los recursos naturales y servicios del ecosistema.
Por ello, Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR), asociación civil sin fines de lucro comprometida en construir la gobernanza, el desarrollo sostenible y la promoción de los derechos indígenas en la Amazonía (www.dar.org.pe), comparte las principales herramientas que viene impulsando, desde su experiencia en el departamento de Loreto, que sirven para promover un crecimiento de calidad desde una mirada de 360°, es decir, una mirada integradora de la Amazonía; y que son resultado del trabajo conjunto con el Gobierno Regional de Loreto y diferentes instituciones de sociedad civil y académicas.
Loreto, la región amazónica que le hace frente al cambio climático
Foto: Mariusz Klusniac vía Flikr
Loreto es el departamento amazónico más grande del Perú, con más de 54 millones de hectáreas de bosques, almacenando el 53% del carbono del Perú en base a su cobertura forestal; alberga imponentes cuencas hidrográficas que confluyen en el Río Amazonas, una de las siete maravillas naturales del mundo.
Siendo una región extensa, la presencia del Estado se hace más difícil para atender necesidades básicas, por lo que es un reto para Loreto revertir el hecho de tener provincias y distritos que se encuentran entre los más pobres del país.
En cuanto al aprovechamiento de recursos naturales, sus depósitos de petróleo, que vienen siendo explotados desde hace más de 40 años, representan una producción aproximada de 8 millones de barriles anuales. No obstante, la crisis financiera internacional de 2008, así como la falta de una adecuada gestión de la infraestructura de transporte del petróleo, hicieron que el precio de éste y su valor de producción disminuyeran considerablemente.
Planificando para un desarrollo con inversiones sostenibles
Loreto está cambiando su estrategia de crecimiento económico dependiente del petróleo, hacia una que integre la conservación y uso sostenible de los bienes y servicios que brindan sus bosques, diversidad biológica y recursos hídricos.
Un primer paso hacia este tipo de crecimiento económico ha sido fortalecer la gestión pública a través del diseño e implementación de instrumentos de planificación y gestión ambiental.
Siguiendo las pautas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos-OCDE y Centro Nacional de Planeamiento Estratégico-CEPLAN, Loreto diseñó y aprobó su nuevo Plan de Desarrollo Regional Concertado “Loreto al 2021”, en el que se apuesta por una diversificación productiva a través del manejo sostenible del bosque, la producción acuícola y el ecoturismo.
Para asegurar que los aspectos ambientales sean ampliamente discutidos por los actores clave, el Gobierno Regional de Loreto, en coordinación con el Ministerio del Ambiente, y con el apoyo de DAR, aplicó una Evaluación Ambiental Estratégica (EAE) durante la formulación de su plan de desarrollo, constituyéndose en la primera EAE de alcance regional en el Perú.
Esta EAE estableció estrategias para fortalecer la gestión ambiental y gestionar adecuadamente las actividades económicas que pueden causar deforestación (agricultura, infraestructura, hidrocarburos, entre otros) y cambio de uso de suelo -o transformación de bosques en tierras de cultivo, pastoreo, etc.-, que es la principal causa del cambio climático en nuestro país y un posible limitante para la nueva visión de desarrollo de Loreto.
Gestionando el potencial natural
Más del 20% de la superficie de Loreto está conservada mediante áreas naturales protegidas de administración nacional, regional y/o privada. Estas áreas tienen un alto potencial de generación de ingresos a través del turismo, con un positivo ritmo de crecimiento equivalente al 17% anual, pues el número de turistas aumenta cada año. Por otra parte, el establecimiento de las áreas naturales protegidas ha permitido que se disminuya la tasa de deforestación en aproximadamente un 40% (estimaciones de GRADE en referencia al año 2000), lo que hace urgente que se potencien los mecanismos y estrategias para gestionarlas adecuadamente.
En esa línea, en Loreto se viene trabajando en el diseño de un Sistema Regional de Conservación (SRC), un espacio de coordinación impulsado por el Gobierno Regional de Loreto, DAR y otras organizaciones de sociedad civil. El SRC ayudará a reducir impactos negativos en las áreas naturales protegidas, mediante la articulación entre el gobierno, la sociedad civil y los empresarios, para la planificación estratégica del uso integral del territorio y el fortalecimiento de las estrategias de conservación.
Además de fortalecer la gestión de las áreas naturales protegidas, se genera una participación activa de los actores que se encuentran en el territorio, quienes usan y cuidan directamente los bosques, siendo socios estratégicos en los procesos de cogestión de los recursos naturales. Así, puede promoverse el desarrollo productivo y la seguridad alimentaria, a través de la investigación de las potencialidades de la diversidad biológica y las cadenas de valor que se pueden fomentar a partir de ello.
Otra buena práctica en Loreto para identificar inversiones potenciales y transparentar el uso y ocupación del territorio es la Infraestructura de Datos Espaciales (IDE), que organiza la información geográfica oficial en un solo gran depósito o geoportal (http://geoportal.regionloreto.gob.pe/) para tener información actualizada y confiable sobre el territorio loretano que facilite la toma de decisiones, como las relativas a actividades económicas sostenibles.
Con un par de clics se puede tener información de concesiones forestales, zonas de pesca de Loreto, así como las especies que se capturan para el mercado regional y nacional, entre otros. Esto puede incentivar el desarrollo económico, por ejemplo, fomentando la cadena de valor de producción pesquera en Loreto: especies como el paiche son consumidas en los mejores restaurantes del mundo.
Una forma de medir los esfuerzos de Loreto hacia su desarrollo sostenible es identificar si éstos han aportado a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero generadas en la región. Para esto, DAR, el Sistema de Estimación de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero-SEEG Perú y expertos de la región han contribuido en un estudio que estima estas emisiones (línea histórica del 2005 al 2014), lo que convierte a Loreto en la primera región en contar con esta información y una línea base para hacerle seguimiento a los resultados de su transición hacia una economía verde.
Un abanico de herramientas y actores para favorecer los negocios
Un territorio con herramientas e instrumentos de gestión y medición de resultados efectivos y con reglas claras favorece un buen clima para los negocios, donde los riesgos son identificados y contrarrestados con anticipación.
Todo ello construye la gobernanza, que se genera a través de herramientas como la evaluación ambiental estratégica, los sistemas de conservación regional, la cogestión para la vigilancia de los recursos naturales, y la infraestructura de datos espaciales, las cuales pueden ser replicadas y aprovechadas por las economías del APEC.
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