En el marco de la Cumbre de Líderes Mundiales de alto nivel en la COP26, el Reino Unido, Noruega, Alemania, EEUU y los Países Bajos, junto a 17 donantes, han anunciado la entrega de fondos directos a los pueblos indígenas que vienen luchando contra el cambio climático, como apoyo para proteger los bosques tropicales.
Las organizaciones que participan en el nuevo compromiso son la Fundación Ford, la Fundación del Fondo de Inversión para Niños, el Fondo Christensen, la Fundación David y Lucile Packard, Sobrato Philanthropies, la Fundación Good Energies, la Fundación Oak, la Fundación William y Flora Hewlett, y, como integrantes del Desafío Proteger nuestro Planeta (Protecting our Planet Challenge), Arcadia, Bezos Earth Fund, Bloomberg Philanthropies, la Fundación Gordon y Betty Moore, Nia Tero, Rainforest Trust, Re:wild, la Fundación Wyss y la Fundación Rob y Melani Walton.
Este compromiso colectivo se dará desde el 2021 hasta el 2025 y el monto inicial asciende a US$1,700 millones y, según el comunicado emitido el 2 de noviembre, el fin de este es ayudar a las comunidades indígenas respecto al avance en los derechos de tenencia forestal, así como reconocer su papel como guardianes y defensores de los bosques y la naturaleza, brindándoles compensaciones.
En relación con los derechos de los pueblos indígenas, se ha manifestado que se busca reconocer los derechos sobre la tierra y los recursos naturales frente a la lamentable situación de vulnerabilidad y desprotección ya que no se garantiza el disfrute de estos derechos respecto a la posesión, administración y control de sus bosques y recursos. Asimismo, se busca apoyar el rol de protección que cumplen las comunidades locales y los pueblos indígenas en los bosques y los servicios ecosistémicos vitales, que en consecuencia contribuye a la lucha contra el cambio climático, el desarrollo sostenible y la preservación del medio ambiente. Así, se pretende revertir la pérdida forestal y por ende, la degradación del planeta para el 2030, buscando contribuir con hasta un 37 % de los objetivos de mitigación climática provenientes del Acuerdo de París.
De igual manera, en la declaración que dieron los funcionarios de los países y donantes, se ha mostrado la alta preocupación sobre los casos de violencia y agresión a derechos fundamentales de los pueblos indígenas. Por ello, invocaron a los gobiernos cumplir con la legislación nacional e internacional para poder protegerlos, así como promover un sistema integral, que se enfoque en la tenencia y reconocimiento de tierras y en el respeto y garantía de los derechos fundamentales de los pueblos indígenas y las comunidades locales.
Algo novedoso de este financiamiento es que los países participantes han asegurado promover la iniciativa de incluir a los pueblos originarios en la toma de decisiones nacionales y globales para la elaboración e implementación de programas e instrumentos financieros que los pueda afectar, tomando en cuenta los intereses de todos los sectores de la población. De esa manera, el secretario de Estado para el Pacífico y ministro de Medio Ambiente aseguró que los pueblos indígenas y las comunidades son los guardianes más eficaces del bosque, razón que se debe tomar en cuenta para incluirlos en el núcleo de las soluciones basadas en la naturaleza para la emergencia climática.
En definitiva, la entrega de este fondo podría marcar un hito en el rumbo de la protección a las zonas forestales de todo el mundo, ya que los bosques son la mejor tecnología de captura de carbono en el planeta, tal y como lo mencionó el líder indígena Tuntiak Katan, indígena shuar de Ecuador que representa a la Alianza Global de Comunidades Territoriales. Es una esperanza para avanzar con los objetivos del Acuerdo de París para combatir la crisis climática.