Foto: Noticias Ambientales
Lima, 08 de noviembre de 2021.- El Predictamen recaído en los Proyectos de Ley 196/2021-CR y 463/2021-CR, presentado la semana pasada por la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de la República, debilitaría la lucha contra los delitos de depredación y tráfico ilegal de las especies de flora y fauna silvestre (terrestre y acuática) en el Perú, que hoy es considerado como el cuarto comercio más lucrativo del mundo y como una actividad del Crimen Organizado a nivel mundial, según la Oficina de Naciones Unidas Contra el Crimen y Drogas (UNOCD).
Diversas instituciones de la sociedad civil como ARBA, DAR, y Oceana Perú , enviaron un pronunciamiento público a la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de la República expresando su preocupación, debido a que en su sesión del 03 de noviembre último se han desvirtuado los alcances de los Proyectos de Ley 196/2021-CR y 463/2021-CR, al proponer la modificación al Capítulo II sobre los Delitos contra los Recursos Naturales del Código Penal, que no haría sino debilitar la acciones de investigación, juzgamiento y sanción en marco de las acciones ejercidas por los operadores de justicia.
Ahora bien, lo que propone la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de la República, es reagrupar los delitos de tráfico ilegal de flora y fauna silvestre, tráfico ilegal de especies acuáticas de la flora y fauna silvestre, depredación de flora y fauna silvestre y tráfico ilegal de recursos genéticos (artículos 308, 308-A, 308-C y 308-D, respectivamente), en un solo artículo en el Código Penal, lo cual podría significar el archivo de casos que vienen siendo investigados, y que pondría en riesgo la posibilidad de sancionar estas conductas ilegales en el futuro.
Siendo que, se usa como excusa para este propósito los Proyectos de Ley señalados – los cuales tienen otro propósito, que es incluir esos delitos a la Ley Contra el Crimen Organizado – para lo cual, se propone otra cosa muy distinta que es la fusión de los cuatro delitos en un solo tipo penal, desconociendo el tratamiento, momento del delito y tecnicidad de los mismos, los cuales tratan objetos de protección y problemáticas diferentes.
Bajo ese contexto, la propuesta desconoce el enfoque de nuestro actual marco legal respecto a cómo se tratan los recursos de nuestra biodiversidad, en el que las especies de flora y fauna silvestre terrestre, acuática y los recursos genéticos tienen normas específicas diferentes, y están bajo competencia de autoridades diferentes. Por lo que, pretender que estos delitos se traten en un único artículo del Código Penal, dificultaría su aplicación por parte de los operadores de justicia ya que se generarán contradicciones, vacíos legales y sobrerregulación que promoverán la impunidad.
En ese sentido, llama la atención que, a pesar de incorporar elementos nuevos que no están en los proyectos de ley previos, la Comisión de Justicia y Derechos Humanos del Congreso de la República no ha esperado a recibir opiniones técnicas de las instituciones competentes y que, por el contrario se haya ignorado la posición en contra de la Unidad Funcional de Delitos Ambientales (UNIDA) y de la Procuraduría del Ministerio del Ambiente.
Finalmente, cabe recordar que el tema de la inclusión de los delitos contra la flora y fauna en la ley de Crimen Organizado ya contaba no solo opiniones favorables de los sectores sino de la sociedad civil, en marzo pasado más de 40 Organizaciones de Sociedad civil mostraron su apoyo y exhortaron al Congreso para que se apruebe ello. Ahora con un Congreso nuevo se ha retomado esa propuesta con los proyectos de Ley referidos, pero al incluir temas distintos en el Pre dictamen se está entorpeciendo su avance.
Datos:
- A nivel mundial, el tráfico ilegal de la fauna silvestre es uno de los comercios ilegales más lucrativos que genera un monto de 5 mil millones a 23 mil millones de dólares anualmente[1]. Sólo la pesca ilegal genera pérdidas por más de 1,200 millones de soles anuales de acuerdo con la FAO.
- El comercio ilegal de especies silvestres es el cuarto comercio más lucrativo del mundo, y es considerado un crimen organizado a nivel mundial, según la Oficina de Naciones Unidas contra el crimen y drogas (UNOCD).
- Durante el 2020 se incautaron al menos 8 cargamentos de troncos de tiburón por un estimado de 28 toneladas (incluyendo especies amenazadas), así como también 2300 kilos de aletas y 117 kilos de caballitos de mar.
- Solo en el 2019 más de 6200 animales vivos de origen ilegal, fueron recuperados por las autoridades en 17 departamentos del país, y en el 2020 la pandemia no detuvo la actividad delictiva, registrándose más de 1400 animales decomisados.
[1] Transnational Crime and the Developing World. Global Financial Integrity. Disponible en: http://www.gfintegrity.org/wp-content/uploads/2017/03/Transnational_Crime-final.pdf